Con el carné de conducir accederá a un puesto de trabajo en Mercabarna

Con el carné de conducir accederá a un puesto de trabajo en Mercabarna

Desde Barcelona nos llega la solicitud de un hombre de cuarenta años, casado y con tres hijos. Des de que llegó en 2009, y durante cinco años ha trabajado en tareas de jardinería.

Después trabajó durante dos años haciendo trabajos de limpieza y mantenimiento a oficinas. El último trabajo que ha tenido ha estado de mozo de almacén de pescado de Mercabarna.

Actualmente está sin trabajo, en el paro, en una situación muy precaria. Podría optar a un puesto de trabajo en la empresa que ha trabajado en Mercabarna, si dispusiera del carné de conducir vehículos.

Acció Solidària Contra l’Atur le concede una ayuda a proceso de inserción laboral de 491,2 € para sacarse el carné de conducir. Esperamos que con este microcrédito sin intereses, que nos devolverá, pueda salir de la precariedad en que se encuentra.

La justicia social

La justicia social

En una mirada hacia el pasado, se puede afirmar que un siglo atrás se vivía peor. Ahora parece que todo el mundo come y tiene móvil. Pero siempre existe el peligro de caer en simplismos.

También podríamos decir que hay una gran parte de la población mundial que vive muy mal, y nosotros no formamos parte de este colectivo. Y nos podríamos alegrar.

Todo ello son siempre buenas excusas para dejar de ver la realidad como es. Y en nuestro mundo, en el que vivimos, no podemos mirar a otro lado cuando sabemos que hay muchos problemas, que lejos de no ser resueltos, cada vez se agravan más.

“El hecho de tener un trabajo no es ninguna garantía de subsistencia económica.”

Hoy que progresamos tanto en las nuevas tecnologías, nos sentimos impotentes de afrontar grandes retos: la emergencia del clima, las guerras en muchos lugares, la gran inmigración, los poderes económicos dominantes, la violencia de género, etc.

Y en este sentido, lo que podría ser más asequible y más fácil de afrontar, también se va alejando: la justicia social. Es decir, que nuestra familia humana más próxima pueda ser capaz de alcanzar un nivel de convivencia y de distribución equitativa de la riqueza que entre todos generamos.

¿Dónde detectamos pues la injusticia social?: básicamente en las consecuencias de muchas disfunciones, alrededor del mundo del trabajo. Y concretamente la gran injusticia es que cada vez más el hecho de tener un trabajo no es ninguna garantía de subsistencia económica. Y eso no pasaba en nuestra historia y sobre todo la de nuestros padres.

También es muy injusto que este fenómeno no esté sobre la mesa de los que gobiernan nuestra sociedad. Y que además el discurso público no parece muy preocupado -y menos ocupado- de esta situación.

Un análisis muy seria y rigurosa del problema es el Informe de Comisiones Obreras de CataluñaUna aproximación a la pobreza en el trabajo” del 2018. Este estudio profundiza mucho en varios aspectos que muestran la gran complejidad y gravedad de lo ocurrido en estos últimos diez años, desde la llegada de la crisis.

Hay muchos elementos que se deben considerar para poder afirmar que en vez de mejorar hemos ido atrás. Sobre todo en el tema del paro que se nos presenta ahora como algo que se está reduciendo y por lo tanto estamos mejor: un gran engaño.

Por ejemplo, en Cataluña, de 2008 a 2018 ha habido una pérdida del 8,1% de ocupación que representa un 47,6% de incremento del paro. Y se considera que hay 400.000 obreros pobres.

También desde Cáritas se afirma que los contratos laborales de tiempo parcial, han evolucionado de 7 días el 18% en 2017, ha pasado en un año al 27%. Y globalmente los contratos de jornada parcial llegan a ser el 48% del total de contratos.

Y cuando se habla del paro, se debería tener en cuenta diversas situaciones asimilables: trabajo parcial involuntario (en Cataluña es un 49,1% de todos los contratos), las personas desanimadas de no encontrar trabajo y que tiran la toalla (29.000 personas), la gran cantidad de personas que padecen lo que se conoce como sobrecualificación, es decir que están preparados para trabajos muy superiores (unas 518.000 personas), los que están en situación de ERE, el paro de larga duración que quedan fuera del sistema, etc.

Y para reafirmar más la consideración de injusticia social deberíamos añadir los salarios tan bajos que no permiten pagar el alquiler de la vivienda, la discriminación de la mujer en salarios y en valoración funcional y el drama de muchos jóvenes que tras haber estudiado una carrera, no consiguen encontrar trabajo

Todo ello nos denuncia que ¼ parte de la población se encuentra en riesgo de pobreza o de exclusión social.

También podríamos hablar de que la reforma laboral aún vigente ha conseguido hacer precario aún más el mundo del trabajo. Y tal sube un poco la media de los salarios, pero esto es debido a la gran diferencia, cada vez más entre los sueldos de los directivos que crecen de forma exponencial y la escasez de los salarios de los trabajadores.

Y la gran crisis de la vivienda y el encarecimiento escandaloso de los alquileres que a pesar de tener un buen trabajo, hay que destinar un elevado porcentaje del sueldo para hacerles frente. Si es que tenemos vivienda y si tenemos salario.

Hay pues ser conscientes de que vivimos en una gran INJUSTICIA SOCIAL.

Miquel Verdaguer
Secretario de Acció Solidària Contra l’Atur

«Para salir del paro he decidido emprender: La Bici Rota»

«Para salir del paro he decidido emprender: La Bici Rota»

Juan Miguel de Barcelona ha decidido emprender con La Bici Rota: un taller de reparación de bicicletes. El mismo nos  explica cómo decidió emprender y el proceso que siguió para hacerlo y abrir su propio negocio:

¿Cómo empezaste con este proyecto? 
Yo soy mecánico de bicicletas y tengo experiencia en el sector pues he estado trabajando de mecánico y de encargado de producción de la empresa Monty de bicicletas desde octubre de 2015 hasta junio de 2019. La empresa fue comprada por BH Bikes en 2018, gran parte de la producción se ha trasladado a Euskadi e hicieron un despido colectivo. Me quedé en paro.
Paralelamente, ya hace unos años que tenía en la cabeza de establecerme por mi cuenta, y me había ido formando y trabajando en esta línea.

“El despido fue el catalizador para saber que era el momento de emprender y que estaba listo para comenzar mi propio proyecto”.

Una vez en el paro, decido volver a empezar pero con mi propio proyecto. El despido fue el catalizador para saber que era el momento de emprender y que estaba listo para comenzar mi propio proyecto. Tenía unos ahorros, además, el dinero del paro, y se combinaron todas las fichas para poder empezar el taller

¿Qué es la Bici Rota?
Es un pequeño taller de bicicletas dedicado al 80% al servicio mecánico y también hago venta de bicicletas pero por catálogo. Quiero abrir el taller en mecánica móvil, es decir, a hacer apoyo en carreras o carreras particulares. Queremos conseguir un pequeño-gran taller. El lema del taller “es que todo tiene solución”.

¿Qué pasos has seguido para hacerlo realidad?
Primero, cuando empecé a pensar en tener mi propio proyecto, ya hace unos años, fui a formarme a EMEB(Escuela especializada en mecánica de bicicletas). Yo trabajaba en una fábrica, la mecánica es la misma, pero la relación con el cliente es nueva, y me he apoyado mucho en ellos en mi proyecto.
Para capitalizar el paro hice un primer plan de empresa básico por el SOC (Servei d’Ocupació de Catalunya), me facilitaron una plantilla. También he ido a Barcelona Activa a realizar diferentes cursos, para formarme y asesorarme, así como una gestoría para que me lleven toda la parte legal y administrativa.
Una tarde, en el barrio con mi pareja, entramos en un local para merendar,  El Antojao, y allí tenían un rótulo de vosotros, y nos explicaron que erais y como las habías ayudado a hacer realidad su cooperativa. Tuve claro que me tenía que poner en contacto con Acció Solidària Contra l’Atur para conseguir la financiación que me faltaba.

¿Has ido a un servicio de banca tradicional?
Sí, establecí un primer contacto, pero el hecho de ser o querer establecerme como autónomo, y como no tenía rentas, no me podían ayudar. Tampoco profundicé.

¿Qué es lo más difícil de emprender?
Para mí, lo más complicado de emprender es la decisión: decir hoy empiezo. Puedes tener muchas ganas, pero el hecho de decir sí, y empezar. Ese día es complicado, sabes que te da un vuelco todo ello, con toda tu vida.

¿Qué recomendarías a futuras personas emprendedoras?
Yo les recomendaría estudiar bien el terreno en el que quieren emprender, lo que se quieren dedicar, tener una buena base, prepararse, y finalmente decidirse. Cuando sabes lo que quieres, parece increíble, pero los medios van saliendo poco a poco. Que maduren durante mucho tiempo el proyecto y que se formen.

¿Cómo ves la Bici Rota de aquí a 5 años?
Lo veo como un taller de referencia mecánico de bicicletas de Barcelona. Quiero ser un apoyo técnico tanto de usuarios particulares como para grandes empresas o profesionales.

Firma del proyecto

Hacer realidad este proyecto me ha supuesto poder hacer realidad un sueño. Me siento feliz, con un poco de inquietud, dentro de la normalidad, pero voy contento a trabajar.

Con todo, una vez presentada el caso a la mesa de proyectos de Acció Solidària Contra l’Atur y dado el visto bueno a la viabilidad del proyecto, hemos acordado conceder un préstamo sin intereses 6.500 € a devolver en 36 meses para adquirir material. Con este proyecto se crea 1 puesto de trabajo.

Justo abrió el negocio un par de meses antes de que estallara la pandemia de COVID-19 y se vio obligado a bajar la persiana temporalmente por el confinamiento. Desde Acció Solidària Contra l’Atur, contactamos con él para ayudarle de nuevo, y pudo reabrir el negocio una vez lo permitieron las autoridades:

“Gracias al aplazamiento de cuotas que me ofrecisteis he podido afrontar los gastos, continuar ofreciendo servicios mínimos durante los meses más crudos de la pandemia y prepararme para la gran demanda de reparación de bicicletas que ha habido en los últimos meses “.

Si tenéis que reparar la bicicleta o adquirir alguna pieza podéis ir:

La Bici Rota
C/ Greco, 22
08031 – BARCELONA